Desde hace años la ONU dedica días del año a temas de relevancia internacional con el fin de enfatizar aquellos temas o elementos primordiales humanos que con el paso de los tiempos se obvian o decaen en el olvido.

El 21 de febrero se celebra el día internacional de la lengua materna.

Las nuevas tendencias neurolingüísticas parecen ponerse de acuerdo en la importancia de una única lengua materna como instrumento ineludible para la evolución cognitiva del individuo a través de la comunicación y la sociabilidad con sus iguales.

Este fenómeno parece confirmarse también en las personas bilingües o multilingües, en las cuales una lengua (L1), la materna, se cristaliza como primera, subyaciendo a las demás. La lengua materna se desarrolla así como la base lingüística del individuo y sirve de referencia y sustento a las demás (L2, L3, etc.). Cualquier elemento lingüístico aprendido se proyecta en la L1 para su reconocimiento, comprensión y aprendizaje. De hecho cada políglota reconoce a menudo tener una lengua en la que se siente más seguro.

En el contexto de la emigración la importancia de la lengua materna adquiere una mayor dimensión ya que su evolución puede verse estancada por la evidente carencia de la misma en el nuevo medio extraño. Además hay que añadir que la llegada a este nuevo medio conlleva el aprendizaje, en la mayoría de los casos forzado, de una lengua extraña que urge por la rápida voluntad de adaptación y normalización.

En este ámbito hay que subrayar la importancia de las clases de Lengua y Cultura  Españolas, cuyo objetivo principal es mantener y fortalecer los lazos del alumno emigrante, o de aquellos hijos de emigrantes, con su lengua materna con el fin de garantizar una positiva evolución lingüística de la L1 y por consiguiente crear una sólida base cognitiva y emocional que facilite el aprendizaje de la lengua extranjera y a su vez una exitosa integración al nuevo medio.

Autor: Óscar Vílchez, responsable del Comité de Escuelas de la Confederación

 

Seit Jahren widmet die UNO bestimmte Tage im Jahr zu international relevanten Themen, mit dem Ziel, diese Themen oder die wesentlichen menschlichen Aspekte, die im Laufe der Zeit vernachlässigt oder in Vergessenheit geraten, hervorzuheben.
Am 21. Februar wird der Internationale Tag der Muttersprache 2018 gefeiert.
Die neuen neurolinguistischen Tendenzen scheinen sich einig zu sein, dass die Relevanz einer einzigen Muttersprache für die kognitive Entwicklung des Individuums und die Kommunikation und Geselligkeit mit Seinesgleichen unverzichtbar ist.
Dieses Phänomen scheint auch bei den zwei- oder mehrsprachigen Personen bestätigt, bei denen eine Sprache (L1), die Muttersprache, sich als erste kristallisiert und den anderen zugrunde liegt. Die Muttersprache entwickelt sich demnach als sprachliche Grundlage des Individuums und dient als Referenz und Stütze der restlichen (L2, L3, usw.). Jedes linguistische erlernte Element projektziert sich auf die L1 zwecks seiner Erkennung, Verständigung und seines Lernens. Tatsächlich gibt jeder Mehrsprachige häufig zu, eine Sprache zu besitzen, in der er sich sicherer fühlt.
Im Kontext der Zuwanderung gewinnt die Muttersprache an Bedeutung, da ihre Entwicklung, durch die Abwesenheit der Muttersprache im Aufnahmeland gebremst werden kann. Darüber hinaus ist anzumerken, dass die Ankunft in dem neuen Umfeld zum Erlernen einer neuen Sprache, meist unter Zwang, führt, wegen der Dringlichkeit einer schnellen Adaptation und Normalisierung.
Auf diesem Gebiet, ist die Wichtigkeit des Unterrichts der Spanischen Sprache und Kultur zu untermauern. Er trägt dazu bei, die Bindung der Schüler mit Migrationshintergrund oder der Kinder von Migranten an ihre Muttersprache zu erhalten und somit, eine positive sprachliche Entwicklung der L1 zu garantieren. Hierbei wird eine solide kognitive und emotionale Grundlage geschaffen, die das Erlernen der neuen Sprache vereinfacht und gleichzeitig eine erfolgreiche Integration im neuen Heimatland gewährleistet.